SERIGRAFIAR CAMISETAS: UNA FORMA DE PROMOCIONAR NUESTRA MARCA

En primer lugar, se hace la malla con el diseño seleccionado. Ésta suele ser de nylon, poliéster o materiales acrílicos. El tipo de malla puede variar en función del material que se vaya a serigrafiar. La cantidad de hilos cambia según lo cerrada tenga que ser la malla. Para trabajar con prendas textiles las mallas tienen menos hilos que para trabajar sobre productos como plásticos, maderas y otros. Otra característica a destacar es el color. Las mallas tienen que ser blancas o amarillas, ya que la luz no refracta y los tonos originales no cambian.
Cuando ya la tenemos se coloca muy tensa en un marco, y se vierte la tinta. Ésta sólo pasará a través de determinados agujeros, formando finalmente la imagen inicial que habíamos elegido. Después se le aplica calor para que se quede bien fija y listo.
Aquí se aprecia un esquema del funcionamiento.
Esta técnica es perfecta para camisetas personalizadas, sudaderas, polos o cualquier tipo de ropa promocional. Con la serigrafía conseguimos que la imagen dure mucho más tiempo con una calidad excelente.
Si tienes en mente encargar una gran tiraje, la serigrafía es una de las mejores opciones a nivel económico. Esto se debe a que la plancha que se emplea puede utilizarse una y otra vez. En cambio, si el pedido es pequeño te recomendamos que recurras a otra técnica de impresión. Es probable que, si el encargo es de pocas unidades, la plancha y la malla te salga más cara que las prendas promocionales en sí.
Esta técnica se trabaja color a color, por eso es complicado realizar degradados como tal. Aun así, se han encontrado formas para imitar este efecto visual. Otro aspecto es que no puede haber una gran variedad cromática, incluso, dependiendo del material textil con el trabajemos, usaremos una cantidad u otra. Por ejemplo, si queremos camisetas para serigrafiar, se pueden emplear hasta 8 colores. Si hablamos de una bolsa de tela personalizada, el límite de colores es inferior.
Como se puede observar, hay factores que influyen en el diseño final de la prenda textil personalizada. Además, los proveedores de camisetas al por mayor no disponen de los pantones exactos. A pesar de que procuran acercarse todo lo posible al color original, muchas veces no se consigue.
Serigrafía al Agua y Serigrafía en Plastisol
La Serigrafía al Agua está hecha como su nombre lo indica con tintas a base de agua. Las tintas a base de agua no contienen plásticos ni PVC. Esto significa que son ecológicas y funcionan de manera diferente a otras tintas. La serigrafía al agua es perfecta para proyectos textiles que quieren ser más respetuosos con el medio ambiente o también para reducir costos de producción.
Este tipo de tintas tienen la propiedad de filtrarse en la tela e impregnarse. Esto deja un mínimo tacto del estampado sobre la tela,
Son ideales para imprimir en prendas blancas y livianas. No tienen un resultado tan bueno cuando se imprimen sobre colores oscuros, pues las tintas tienden a opacarse.
Gracias a su gran versatilidad y resultado óptimo para tener camisetas ecológicas personalizadas, bolsas de tela algodón, toallas de felpa, bolsas de tocuyo y otros tejidos naturales. Esto nos permite crear productos 100% ecológicos y respetuosos con el medio ambiente.
La Serigrafía Plastisol por el contrario está hecha de plásticos. Las tintas de plastisol son las más utilizadas, bien elogiadas por la gran consistencia del color y la precisión en los colores pantone.
Las tintas también son fáciles de usar, ya que no se secan, lo que les permite mantenerse fluida y transferirse bien a través de la pantalla.
La tinta Plastisol funciona bien tanto en prendas claras como oscuras y logra semitonos y degradados perfectamente. Estas tintas no son tan ligeras como las basadas en agua, por lo que el tacto al tocar la impresión es bastante notorio, esto puede ser positivo en función del gusto personal.
Hay que tomar en cuenta que las tintas plastisol contienen PVC por lo cual no son tan ecológicas.